Clara Zetkin en una manifestación en Berlin el 31 de Agosto de 1921
En el Día Internacional de la Mujer, celebramos la lucha de las mujeres a lo largo de la historia. La lucha de mujeres que sin temor se alzaron en contra de las cadenas que la sociedad, los condicionamientos religiosos y los prejuicios les impusieron. Emprendieron una lucha porque la mujer sea considerada un sujeto de pleno derecho en nuestras sociedades, lucharon por nuestro derecho a estudiar, votar y a tener plena y activa participación en todos los ámbitos de la sociedad. Estas mismas mujeres, lucharon por nuestro derecho a la utilización de métodos anticonceptivos que nos permitan decidir sobre nuestros cuerpos y planificar a conciencia y responsabilidad nuestras familias.
Estas mujeres, las feministas de todo el mundo, entregaron y arriesgaron sus vidas por una causa que ha traído importantes beneficios y transformaciones en nuestras vidas. Hoy hombres y mujeres celebramos la lucha de esas mujeres y la lucha de las mujeres que continúan batallando en contra la discriminación, la violencia y la marginación de la mujer en la sociedad.
Hoy, celebramos este día que fue instaurado hace 101 años (1910) por la alemana Clara Zetkin, durante el Congreso Internacional de Mujeres Socialistas en Copenhague, Dinamarca. Los inicios de la lucha de la mujer fue una mejoría en sus condiciones laborales. La primera fue una marcha de trabajadoras de la industria textil en 1857 en Nueva York seguida en 1908 por 40,000 mujeres costureras industriales que se declararon en huelga, demandando el derecho de unirse a los sindicatos, mejores salarios, una jornada de trabajo menos larga y en rechazo al trabajo infantil. Esta huelga, fue brutalmente reprimida por la policía estadounidense y más de 100 trabajadoras murieron quemadas en un incendio en la Fábrica "Textil Cotton". Desde el punto de vista político, la bandera en defensa de las mujeres fue liderada por los partidos socialistas en Estados Unidos y Europa, que desde 1908 se aliaron para posicionar el Día de la Mujer.
En Nicaragua la chontaleña, educadora, líder gremial, teatrista y ensayista Josefa Toledo de Aguerrí marcó la pauta del feminismo en nuestro país. Luchó en un país que tenía por precepto constitucional que “Todos los nicaragüenses son iguales ante la ley, salvo en cuanto a la mujer por las diferencias que resultan de su naturaleza y del bien de la familia”. (1939)
Han pasado 100 años, y la lucha para mujeres en todas partes del mundo aún sigue. Es una lucha que debemos emprender también al interior de nuestros hogares, una lucha en contra de los estereotipos condicionantes que se albergan en nuestro inconsciente y que han formado parte de nuestras vidas desde que nacimos, mensaje subliminales en los medios de comunicación, dichos, leyendas, lenguaje y costumbres.
La gran pregunta: ¿Queremos el poder? En un estudio que se realizó en Estados Unidos con jóvenes recién graduadas sobre sus expectativas profesionales, muchas aún son recatadas en sentirse capaces de tomar roles y posiciones de liderazgo en el ámbito público y privado. Esto nos dice, que la transformación no es tarea únicamente de hombres, sino también de nosotras mismas y nuestra percepción de nuestro rol y responsabilidad para con la sociedad.
En fin, este día mi reconocimiento y admiración por las mujeres feministas en Nicaragua, quiénes han debido navegar en contra la corriente y luchar - aún en contra de la discriminación femenina - sin que se le sean reconocidos plenamente sus méritos y su lucha por nuestros derechos.
En Nicaragua, el 70% de la actividad económica en el mercado informal y en las PYMES está en manos de mujeres. La mayor responsabilidad de la manutención y educación de l@s hij@s recae en los hombros de las mujeres. En América Latina y el Caribe, según un estudio de la FAO, 58 millones de mujeres viven en zonas rurales y 17 de ellas formas parte de la población económicamente activa y 4 millones son productoras agropecuarias, sin embargo un escaso porcentaje de esas mujeres tienen titularidad de las tierras que ellas mismas trabajan.
Es muy importante que hombres y mujeres reaccionemos y veamos a la mujer como un sujeto de pleno derecho en el ámbito empresarial, público y económico. Que superemos la tendencia a la victimización del género femenino, y rechazar que se sigan utilizando nuestros cuerpos como mercadería, buscando y fomentando validación y reconocimiento en la sociedad por parámetros físicos.
Yo quiero en especial, rendir un homenaje a mi abuelita y a mi madre, quienes con su ejemplo, (el método más contundente de enseñanza) criaron a mujeres independientes y trabajadoras. Ambas, nos han enseñado que no hay meta inalcanzable y que todo es posible si se hace a base de esfuerzo y trabajo.
Les felicito, hombres y mujeres, amig@s míos, en conmemoración de la lucha de tantas mujeres, para mejorar la calidad de vida de todas las mujeres en nuestras vidas, hermanas, hijas, madres, familiares y amigas.
